Introducción
Tradicionalmente plazas de mercado, centros comerciales y tiendas de barrio; entre otros, han sido los escenarios donde productores y consumidores han interactuado para intercambiar bienes y servicios, aunque con una generación de valor muy limitada, debido a los altos costos de producción, distribución y ventas implícitos en esta forma de interacción.
Estos escenarios han evolucionado muy rápidamente en plataformas digitales que permiten interactuar a productores y consumidores generando cada vez más valor entre ellos. Este valor se traduce, no solo en el enorme alcance y cobertura que tienen, sino en la gran rapidez y eficiencia de las interacciones que se dan entre las partes; generar beneficios mutuos, incluyendo mayores ventas, reducción de costos, diferenciación de productos y servicios, optimización de procesos y transformación cultural; a través de modelos de negocio disruptivos.
Por otro lado, las tecnologías de la cuarta revolución en las que se apoyan las plataformas digitales están cada vez más disponibles y a precios asequibles, reduciendo significativamente la brecha de oportunidades entre grandes y pequeñas empresas:
Las grandes empresas, con productos consolidados en el mercado, tienen la posibilidad de transformar y evolucionar el concepto de plataforma, con la oportunidad de promover una inmensa variedad de interacciones con sus clientes y con la capacidad de crear una comunidad con ellos, involucrándolos de manera temprana. desde la idea de nuevos productos y servicios, creación conjunta; hasta su mejora continua; incluso permitiendo el descubrimiento de nuevos modelos de negocio.
Por su parte, las pequeñas y medianas empresas, además de los beneficios mencionados anteriormente, tienen la gran oportunidad de ganar participación en un mercado globalizado, y escalar a gran velocidad, a costos marginales.
En ambos casos, el factor clave de éxito no está en la tecnología que utilizamos, sino principalmente en el diseño que se logre de la plataforma, mediante el establecimiento de un círculo virtuoso de retroalimentación autorregulado, donde el crecimiento de la misma, la calidad y el control lo realiza la propia comunidad, y el valor generado por las interacciones entre las partes asegura un mayor consumo y, por tanto, una mayor producción; y viceversa.
Visualizando la Plataforma
Para poder hablar sobre plataformas, deberíamos poder visualizarlas. Visualizamos una plataforma dividiéndola en capas y componentes que encapsulan las partes interesadas y las tecnologías que conforman el ecosistema de la plataforma.
Partes interesadas: Son todas las personas y entidades que participan y contribuyen a la interacción en la plataforma; pueden ser clientes, proveedores, socios, etc.
Canales e integraciones: Todos los medios / canales / modos posibles a través de los cuales los interesados interactuarán y / o se integrarán con la plataforma.
Generadores de valor: la interacción es una parte vital de una plataforma, y su objetivo es aumentar la interacción y el compromiso de las partes interesadas. La mejor manera de hacerlo es comprender los beneficios y las motivaciones que aumentan la interacción.
Estrategias: Corresponde a la capa de gestión y gobierno, donde se formulan y ejecutan todas las estrategias. Algunas organizaciones son entidades complejas y requieren una cuidadosa atención no solo a las estrategias, sino también a la organización, estructura, alineación y cultura.
Plataformas habilitadoras: Las tecnologías de la cuarta revolución industrial permiten a las organizaciones digitales ejecutar sus estrategias; estas son una parte vital e integral de una Plataforma. También se consideran, por supuesto, prácticas Agile y DevOps para la ejecución y entrega eficiente de soluciones tecnológicas.
Principios core para construirla
La construcción de una estrategia de plataforma exitosa requiere basarse en los siguientes principios básicos:
Centrado en el cliente: La empresa digital está impulsada por el enfoque en el cliente, cumpliendo y superando las expectativas del cliente. Debe diseñar sus servicios con un principio de “primero digital”, proporcionando acceso a través de todos los canales esperados e incluyendo una integración e interoperabilidad fluidas con otros socios y proveedores. También significa generar confianza en su capacidad para proporcionar servicios seguros y mantener la privacidad y la ética como pilares fundamentales.
Liderazgo, gestión y estrategia: el liderazgo digital lleva el enfoque del cliente a la empresa y sus estructuras y organiza redes y ecosistemas eficientes. Lograr esto significa deshacerse de los silos y una mentalidad aislada y alinearse con la visión digital para diseñar políticas y servicios que sean eficientes y rentables al tiempo que brindan el máximo beneficio al usuario. El intercambio de activos, la creación conjunta y la apertura y transparencia se convierten en piedras angulares de una empresa digital.
Infraestructura: proporcionar servicios digitales a través de la demografía y las geografías requiere infraestructura, y eso a su vez requiere visión a largo plazo, inversiones inteligentes y asociaciones con industrias privadas para crear la infraestructura fundamental necesaria sobre la cual construir servicios digitales.
Digitalización y automatización: la automatización y digitalización de procesos y servicios, así como la creación de productos digitales primero, conducen a una mayor eficiencia y alcance de la empresa a través de la demografía y geografías. Además, al adoptar un enfoque digital primero, las organizaciones preparan sus servicios para el futuro y demuestran su compromiso con las partes interesadas.
Plataformas habilitadoras: las plataformas de empresas nativas digitales deben adoptar estándares abiertos, diseñando y desarrollando plataformas y ecosistemas con una mentalidad centrada en la nube y estrategias de API sólidas. La experiencia del desarrollador también debe ocupar un lugar central; proporcionar las herramientas necesarias y adoptar las prácticas y la cultura Agile y DevOps se convierten en requisitos previos. La ciberseguridad y la privacidad son fundamentales para las plataformas digitales, por lo que deben formar parte de los principios y prácticas de diseño y desarrollo.
Beneficios para la organización y para los clientes
Mediante la implementación de una estrategia de plataforma digital, una empresa puede obtener los siguientes beneficios:
Reducciones de costos debido a estrategias empresariales abiertas
Mejor integración e interoperabilidad de datos y servicios
Agilidad y eficiencia en toda la empresa
Mejor compromiso del cliente y mayor satisfacción
Mayor colaboración y cooperación entre las partes interesadas
Mayores oportunidades de innovación a través de datos abiertos y API abiertas
Por otro lado, los clientes se beneficiarán de:
Los servicios mejores, más eficientes y automatizados dan como resultado ahorros de tiempo y costos
Mejores experiencias de usuario gracias a servicios uniformes y uniformes
Mejor comprensión de la disponibilidad y accesibilidad del servicio
Acceso mejor y más rápido a la información y los datos
Inclusión digital: brindar igualdad de oportunidades para todos los clientes independientemente de la demografía o geografía
Conclusiones
Para seguir siendo relevantes en tiempos en que la disrupción está a la vuelta de la esquina, las empresas deberán pensar como empresas nativas digitales y adoptar el pensamiento de plataforma. Además, necesitan construir plataformas que permitan velocidad, agilidad y fácil acceso a datos en tiempo real para análisis y toma de decisiones.
Referencias:
The Business of Platforms: Strategy in the Age of Digital Competition, Innovation, and Power by Michael A. Cusumano, Annabelle Gawer and David B. Yoffie
Info-Tech Research Group. Drive digital transformation with platform strategies, 2019 – Arif Mustafa, Director Research, CIO Advisory
Platform Revolution: How networked markets are transforming the economy – and how to make them work for you by Geoffrey G. Parker, Marshall W. Van Alstyne, and Sanger Paul Choudary.
